(Por Jose Guillermo Alfonso).
El próximo jueves 13 de noviembre, la ciudad de Corrientes se convertirá en un epicentro de debate ideológico al recibir al presidente de la República Argentina, Javier Milei.
El mandatario será la figura central de la conferencia de clausura del 12º Congreso de Economía Regional del Club de la Libertad, un evento que ya anticipa una convocatoria muy importante en el Salón Espacio Andes (Avenida Maipú 3840).
Esta visita va más allá de la mera presencia presidencial. Marca una reafirmación en el interior del país de lo que es, esencialmente, una agenda de estructura ideológica que guía su administración, a menudo caracterizada por una no gestión de políticas públicas en el sentido tradicional.
El Club de la Libertad es un escenario emblemático para el presidente. Se trata de uno de los espacios donde el pensamiento liberal y libertario comenzó a tomar forma pública en la región, convirtiéndose en un terreno fértil para la promoción de la economía de mercado y la defensa de los derechos individuales.
El Congreso, bajo el lema "Los desafíos del crecimiento económico", no solo buscará analizar la coyuntura, sino, fundamentalmente, legitimar y reforzar la visión de un cambio estructural propuesto por el gobierno. La disertación presidencial servirá, sin duda, como un acto de movilización y reafirmación de su “batalla cultural”.
Se espera un encuentro con una audiencia ya convencida, reflejando la tendencia del Ejecutivo a priorizar los círculos ideológicamente afines. La ausencia prevista de encuentros con referentes políticos de otros sectores subraya que el objetivo no será construir consensos plurales, sino profundizar la fe en el modelo propuesto.
La Utopía y la Tensión Moral
Esta propuesta de cambio radical, sostenida por una férrea convicción ideológica, puede ser interpretada como una forma de utopía. Siguiendo la perspectiva filosófica de Francisco Alsina (1999), la función de la utopía es "desencadenar una tensión moral que evidencia la insatisfacción y motive éticamente a pensar en otros futuros posibles".
El mensaje que el presidente dejará en Corrientes buscará justamente eso: catalizar la insatisfacción con el pasado y movilizar a la sociedad hacia un futuro prometido por las fuerzas del mercado. El liberalismo, en este contexto, se convierte en el contenido positivo que surge como respuesta a la crisis histórica actual.
La Utopía como Desafío a la Pluralidad
Cuando el presidente Milei se dirija a la masiva audiencia en Corrientes, estará reforzando una visión de la Argentina basada en principios innegociables. Sin embargo, el desafío de la gobernabilidad democrática rara vez se resuelve solo con la convicción ideológica.
El texto de Alsina nos advierte que el propósito de esta tensión moral es, en última instancia, motivar una "visión plural y no única de la libertad".
Esta columna de opinión anticipa que el Congreso del Club de la Libertad será un éxito rotundo en la reafirmación ideológica. El verdadero examen de la visita presidencial, sin embargo, se medirá en la capacidad del modelo para trascender su nicho y abordar la complejidad de la gestión real.
La pregunta que quedará flotando en el aire de Corrientes tras la partida del mandatario es: ¿Puede la utopía liberal alcanzar la efectividad y la estabilidad nacional sin un encuentro real con las “otras visiones” y sin tender puentes hacia la pluralidad política que busca transformar?