El hallazgo de un objeto cilíndrico metálico en Campo Rossi, movilizó a la policía y a los bomberos, quienes confirmaron que se trata de una vaina de un tanque de combustible de un cohete. Por sus posibles riesgos tóxicos, se perimetró el área y se convocó a la Fuerza Aérea para su retiro seguro.
El hecho se enmarca en la creciente preocupación por la basura espacial y recuerda tanto los peligros de los restos orbitales como la tradición chaqueña de hallazgos extraordinarios en Campo del Cielo.
Un objeto metálico cilíndrico fue hallado incrustado en el suelo de una propiedad privada en Campo Rossi, localidad cercana a Puerto Tirol. El hallazgo, ocurrido el jueves por la tarde, despertó sorpresa entre los vecinos, quienes alertaron de inmediato a las autoridades ante lo que consideraron una situación inusual. El dueño del predio, Ramón Ricardo González, permitió el ingreso de la policía, que constató la presencia del artefacto y dio intervención al Departamento de Bomberos Metropolitana para descartar riesgos iniciales.
El operativo incluyó el cierre preventivo del lugar y la restricción de acceso a personal técnico especializado. La medida buscó garantizar la seguridad de la población, ya que el origen del objeto no era claro en un primer momento. Mientras tanto, las especulaciones entre los vecinos señalaban la posibilidad de que se tratara de una pieza relacionada con cohetes de la empresa SpaceX, hipótesis alimentada por la apariencia cilíndrica del material.
La confirmación oficial llegó desde la Jefatura de la Policía del Chaco, que informó que el objeto corresponde a una vaina de un tanque de combustible de un cohete. El artefacto, según se explicó, está fabricado en fibra de carbono y presenta características propias de estructuras utilizadas en sistemas de propulsión espacial.
La identificación disipó rumores iniciales y permitió enmarcar el hecho dentro de los casos de caída de restos de origen espacial que, aunque poco frecuentes, se registran en distintos puntos del mundo.
Las autoridades advirtieron que el material podría liberar polvo tóxico al contacto y recordaron que este tipo de tanques transporta hidracina, un combustible nocivo para la salud humana.
Frente a esa situación, se dispuso ampliar el perímetro de seguridad alrededor del lugar y se recomendó a la población no acercarse ni manipular objetos desconocidos en caso de nuevos hallazgos. El objetivo de estas medidas fue reducir cualquier riesgo de intoxicación y evitar incidentes secundarios.
INTERVENCIÓN DE AUTORIDADES Y CONTEXTO
En paralelo, se anunció la llegada de una comisión especializada de la Fuerza Aérea a la provincia, prevista para este viernes, con el propósito de retirar el artefacto de forma segura. El trabajo de este equipo técnico será clave para trasladar y analizar la pieza, garantizando que el procedimiento no genere daños ambientales ni riesgos a la salud de la población cercana. La policía chaqueña mantiene el resguardo de la zona hasta tanto se complete la intervención.
El episodio se inscribe en un contexto más amplio de preocupación internacional por la basura espacial. Aunque en el norte del país no se habían registrado antecedentes de este tipo, especialistas advierten desde hace años que el incremento de restos orbitando alrededor de la Tierra representa un peligro creciente. La acumulación de material abandonado tras misiones espaciales podría, según expertos, dificultar el acceso futuro al espacio y generar amenazas para las próximas generaciones.
En ese sentido, el Southwest Research Institute (SwRI) desarrolló un sistema de detección y caracterización de micrometeoroides y desechos orbitales, capaz de registrar impactos en satélites y naves espaciales. “La mayoría de las naves espaciales sobreviven a impactos menores sin que los sistemas se rompan ni los operadores en la Tierra se enteren”, explicó Sidney Chocron, científico de la institución.
Además, señaló: “Nuestro dispositivo está diseñado para enviar datos a la Tierra con información importante antes de que se observen daños, lo que también puede influir en futuras decisiones de diseño”.
La provincia del Chaco ya cuenta con un antecedente histórico vinculado a objetos de origen extraterrestre: Campo del Cielo, un sitio donde hace unos 4000 años impactó una lluvia de meteoritos metálicos.
Allí se han hallado grandes masas de hierro enterradas, algunas de las cuales figuran entre las mayores descubiertas a nivel mundial. En 2016, por ejemplo, se encontró un meteorito de más de 30 toneladas en la zona de Gancedo.
En aquel momento, Mario Vesconi, presidente de la Asociación de Astronomía del Chaco, expresó: “Si bien sabemos detrás de los que estamos y de lo que se trata nuestra investigación, lo que nos sorprende es el tamaño y pesaje”. Ese antecedente resalta la singularidad del actual hallazgo, aunque en este caso se trate de un resto tecnológico y no de origen natural.
