Adios se apresta a decir la multinacional francesa Carrefour de tierras argentinas. El gigante del comercio minorista, con más de 600 locales y más de 17.000 empleados, ha decidido vender e irse, luego de más de 4 décadas de historia y negocios en aquellas latitudes.
¿Qué la llevó a tomar esta decisión? Y, sobre todo, ¿la seguirán otras? ¿Puede hablarse de un éxodo de capitales multinacionales? ¿O es solo un caso aislado?
“Carrefour se va por falta de rentabilidad y porque no hay mercado en Argentina para el consumo suficiente para que ganen plata todas las cadenas presentes en el país”, explica a DW el economista Alejandro Bercovich.
“No es un caso aislado, hay efectivamente un éxodo de multinacionales de la Argentina, que tiene que ver básicamente con el estancamiento, con que cae el consumo, y con que este modelo tampoco ofrece un horizonte de crecimiento”, asegura el experto desde la capital argentina.
“Carrefour quedó grande para un país que quedó chico”, condensa, en el mismo sentido, la periodista especializada Silvia Naishtat. “Porque, además del porcentaje actual de pobreza del 30 por ciento, se calcula que la mitad de la población no llega a fin de mes”, indica en diálogo con este medio.
“En términos de consumo masivo, la Argentina es hoy un mercado como Chile, pero sin reglas de juego estables”, agrega a la lista de factores que estarían detrás de la decisión de la multinacional francesa.
Asimismo, “hay un cansancio de la Argentina tras largos años de cepo (restricción cambiaria), en los que no podían disponer de sus dividendos”, destaca. “El gobierno de Milei ha flexibilizado la operatoria cambiaria”, precisa. “Muchas multinacionales ven una oportunidad para salir de la Argentina”, contextualiza la editora de economía del argentino