En la provincia de Corrientes, la Red de Hemato-oncopediatría se ha consolidado como una herramienta clave para el abordaje integral del cáncer infantil.
Esta red forma parte de las Redes de Especialidades del Ministerio de Salud Pública, a cargo de Ricardo Cardozo, impulsadas por el gobernador Gustavo Valdés y coordinadas por la subsecretaria de Atención Primaria de la Salud, Alicia Pereira.
Su objetivo central es mejorar la calidad de atención en distintas áreas mediante el trabajo coordinado de profesionales de la salud.
La Red de Hemato-oncopediatría fue creada en 2022 en el marco de la Ley de Oncopediatría y responde a una política de salud pública que promueve la articulación eficiente de recursos sanitarios. Su diseño busca garantizar el acceso equitativo y de calidad a diagnósticos y tratamientos para niños y adolescentes con cáncer, respetando un enfoque centrado en los derechos del paciente.
La principal finalidad de esta red es la detección precoz de patologías oncológicas en la infancia. Según datos oficiales, en Argentina se diagnostican alrededor de 1.400 casos de cáncer infantil por año.
Entre estos, las leucemias representan el 37%, los tumores del sistema nervioso central el 19%, y los linfomas el 12%. La tasa de incidencia de leucemias en menores de 15 años se estima entre 30 y 40 casos por millón.
En este contexto, el diagnóstico precoz se vuelve determinante, ya que puede aumentar significativamente las tasas de supervivencia. "Hay varios síntomas de alerta del cáncer infantil que pueden detectar las familias y los profesionales sanitarios de atención primaria suficientemente formados", destacan los especialistas.
La red funciona como un sistema articulado entre oncólogos, pediatras y médicos generalistas, tanto del hospital Juan Pablo II como de otras localidades del interior provincial. “Esta red se configura con especialistas como son las oncólogas del hospital Juan Pablo II, además de profesionales del interior, la mayoría pediatras. Se presentan los pacientes y las oncólogas determinan la conducta a seguir con cada uno de ellos”, explicó la coordinadora Patricia Gómez de la Fuente.
Uno de los pilares del funcionamiento de la red es la accesibilidad a la consulta especializada. La red acorta tiempos, facilita la derivación de pacientes y permite establecer un protocolo de atención común a partir de guías diagnósticas estandarizadas. “Este sistema permite acceder fácilmente a la consulta especializada”, agregó Gómez de la Fuente.
IMPACTO SANITARIO Y BENEFICIOS ESTRATÉGICOS
Además del componente asistencial, la Red de Hemato-oncopediatría se apoya en una estrategia de formación permanente. Se promueven capacitaciones orientadas a sensibilizar a los profesionales de atención primaria sobre la importancia de la sospecha temprana, con el objetivo de mejorar los índices de diagnóstico oportuno en todo el territorio provincial.
En este sentido, se elaboraron Guías de Algoritmo Diagnóstico Oportuno, documentos que organizan la información médica de forma accesible para su aplicación rápida y eficaz en los primeros niveles de atención. Estas guías representan un recurso clave para unificar criterios y garantizar una respuesta adecuada ante los primeros síntomas sospechosos.
La implementación de esta red genera beneficios en distintos niveles. En el plano administrativo y estratégico, permite articular los distintos eslabones del sistema sanitario, mejorando la respuesta ante casos específicos y fortaleciendo la accesibilidad en zonas alejadas o con escasa infraestructura.
En el nivel de gestión del conocimiento, se genera una comunidad profesional que intercambia experiencias y saberes, lo que contribuye a ampliar el alcance del conocimiento médico especializado. Este enfoque colaborativo permite trasladar saberes locales a un contexto más amplio, favoreciendo la actualización permanente.
Respecto a la administración de recursos, la red permite un uso más eficiente de la infraestructura sanitaria existente. Según el Ministerio de Salud Pública, se busca “aumentar la disponibilidad, racionalidad y productividad en el uso de recursos”, ordenando los procesos de atención y evitando superposiciones.
Desde la perspectiva de la gestión política, la articulación entre distintos sectores del sistema de salud permite repensar el funcionamiento institucional. Según explicaron desde la cartera sanitaria, este modelo “obtiene logros en términos de calidad, eficiencia y eficacia”.