En una votación con amplio respaldo opositor, el Senado de la Nación sancionó una ley que aumenta y actualiza el presupuesto destinado a las universidades nacionales. La medida, aprobada con 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención, fue impulsada por diversas fuerzas políticas, entre ellas, radicales, kirchneristas, partidos provinciales y bloques menores.
La ley establece la actualización mensual del presupuesto universitario en base a la inflación, con retroactividad al 1° de diciembre del año pasado, garantizando una distribución de fondos en función del número de estudiantes, egresados, hospitales y escuelas a cargo, y la actividad científica de cada institución.
El costo fiscal de la norma es de aproximadamente $780.000 millones, lo que equivale al 0,14% del PBI. Los sectores oficialistas han criticado la medida, señalando que no define claramente las fuentes de financiamiento, acusando a la oposición de demagogia en un tema clave como la educación.
El presidente Javier Milei ya anunció que vetará la ley, lo que podría generar un fuerte costo político, especialmente en un contexto donde la educación pública ha motivado movilizaciones masivas.
Cabe remarcar que esta decisión se suma a un clima de tensión en el Congreso, de cara a la presentación del presupuesto nacional 2025, donde se prevén nuevos debates entre el Ejecutivo y la oposición.
