(Por Jose Miguel Bonet*). El uso estratégico de las leyes para perjudicar a disidentes o rivales políticos no busca hacer justicia sino conseguir, por medios inaceptables en democracia, efectos políticos a través del poder judicial
El término lawfare, una fusión de law (ley en inglés) y warfare (guerra), es una expresión de origen militar que desde finales del siglo XX se ha venido utilizando para referirse al uso abusivo de la justicia para perjudicar o desactivar a un oponente. Este término ha sido muy utilizado en los últimos años por el supuestos casos de abuso judicial por los que los tribunales han abierto investigaciones para perseguir a miembros de partidos políticos, el término se emplea en el ámbito militar para describir un método de “guerra asimétrica no convencional”, en el que la ley es usada “como un medio para conseguir un objetivo militar”. En el ámbito de la política, designa “el uso de procedimientos judiciales con fines de persecución política, desacreditación o destrucción de la imagen pública e inhabilitación de un adversario político”. “Las expresiones ‘persecución judicial’, ‘instrumentalización de la Justicia’ (con fines políticos o electorales) y ‘judicialización de la política’, según el contexto, son opciones válidas y transparentes en español para sustituir este anglicismo,
No se trata sólo de un juego de palabras: "judicialización de la política" y "judicialización de lo político". Son dos caras muy diferentes de un fenómeno en el que la institución política es la misma, el Poder Judicial. De un lado, están los grupos marginales que van a las puertas de las cortes con demandas urgentes de vida o derechos, como no morir o no sufrir discriminación. Del otro lado, están los grupos privilegiados y favorecer las estructuras para el mantenimiento del orden ideológico de poder. Unos mueven la democracia de los oprimidos, otros la tiranía del mando. No es sin razón que Montesquieu describió que "no hay más cruel tiranía que la que se ejerce a la sombra de las leyes y con los colores de la justicia".
Como afiliado de la UCR con más de 30 años de andadura sostengo que las elecciones internas le dan oxígeno a la vida interna de los partidos y promueve los recambios,la Judicializacion no es el camino,el camino son las internas que exprezan la voluntad del afiliado.
*Desde Mburucuyá