Se fue Luis Llarrens. Lo hace el mismo día de la fundación de Corrientes, que lo tiene entre sus mejores retratistas Artista pleno; ser humano comprometido.
Llarens deja una prolífica obra, muchas inéditas, tejidas en la bohemia de un bar o en las tertulias políticas o en un proyecto de los tantos que el tiempo esfuminó .
Creció a la par de otro ícono , Juan Carlos Soto, con quien animó uno de los proyectos más audaces y concretos del arte correntino, Arte Ahora desde dónde creció el muralismo hoy identitario de la Ciudad de Corrientes.
No fue el artista de la torre de marfil. Luis se embanderó con las mejores causas sociales de la época . Desde la plástica se entremezcló con el periodismo integrando varios staff, acaso el más ambicioso el del primer diario cooperativo de Corrientes, El Otro, nombre que responde a su idea y cuyas páginas ilustró.
Fue el quien acuñó la metáfora navegantes de utopías. Hoy zarpa uno de ellos.
Eugenio Montero