( Por José Goretta, para momarandu.com). En el pequeño poblado de Colonia Pando, en Corrientes, y en un clima de gran emotividad, finalmente pudieron encontrarse Geoffrey Cardozo, el ex militar británico que tuvo la tarea de recoger y darle sepultura a los cuerpos de los soldados argentinos caídos en Malvinas, y Elma Pelozo, madre de Gabino Ruiz Diaz, el ex combatiente correntino cuya identificación abrió el camino para el proceso para conocer la identidad de más de 115 ex combatientes argentinos.
Cuando fue a la guerra de Malvinas, Gabino Ruíz Díaz, ex combatiente oriundo de Corrientes, anotó su DNI en la medalla que colgaba de su cuello, no sabía que ese número no solo serviría para identificar su cuerpo 35 años después, así como el de más de identificar a más de 115 soldados argentinos caídos en Malvinas.
Ese dato anotado por Gabino fue preservado por el coronel Geoffrey Cardozo, el militar británico que tuvo la difícil tarea de recoger los cuerpos de los soldados argentinos de los campos de batalla y darles honrosa sepultura en el cementerio de Darwin.
Así, entre numerosas documentaciones y objetos preservados por Cardozo y entregados a la Fundación No Me Olvides, de Argentina, llamó la atención un cuerpo identificado por un número, el 16404614. Era un DNI o un número de rol de combate.
Ese número era coincidente con los DNI de ex combatientes, era correlativo con la misma clase, la de 1961. Era un DNI o un número de rol de combate. Al llegar a la Argentina, lo buscaron y pertenecía a Gabino Ruíz Díaz.
De esa forma, con solo ese dato, se había identificado al primer combatiente argentino sepultado como "Soldado solo conocido por Dios" en Darwin, lo cual abriría luego una campaña que posibilitó superar ampliamente el centenar de identificados.
La madre de Gabino es Elma Pelozo, su padre murió años atrás, buscándolo.
A mediados de marzo de 2019 una comitiva de familiares de los ex combatientes argentinos enterrados en Darwin viajó a Malvinas para visitar las tumbas de los soldados identificados. En ese viaje, estuvo Geoffrey Cardozo, el militar inglés, quien tras ese viaje tenía previsto reunirse con Elma Pelozo pero por cuestiones de salud la madre del ex combatiente no pudo hacerlo.
Ante ello, el mismo Geoffrey Cardozo decidió visitar a la mujer en su casa ubicada en la localidad de San Roque, Corrientes, más precisamente en Colonia Pando donde Gabino tiene una estatua conmemorativa.
Para Cardozo esa visita a Elma era considerada como un "cierre" de todo el proceso de identificación de soldados que se inició con el caso de Gabino. Pero organizaciones de ex combatientes, impidieron la visita del ex militar inglés, y Cardozo junto a la delegación que lo acompañaba, estando ya cerca de San Roque.
Ahora, a casi tres años, y casi secretamente, Geoffrey Cardozo, de visita en Argentina, viajó hasta Colonia Pando y pudo de esa forma concretar el tan ansiado encuentro con Elma.
Acompañado de Julio Aro y Miguel Monforte presidente y secretario de la Fundación No me olvides respectivamente, Cardozo compartió largos momentos de la jornada lluviosa con Elma.
“Nunca dudé que Geoffrey tenía que llegar a mi casa, porque yo recibo a todos lo que quieren venir, soy una mamá malvinera y muchos me quieren conocer, y a todos les doy la oportunidad” señaló Elma sobre el encuentro, según reproduce la Fundación No Me Olvides.
Agregó que “no tengo palabras para expresar mi agradecimiento para este señor que hizo tanto por nuestros chicos, a los forenses que hicieron un gran trabajo, y a los miembros de la Fundación No Me Olvides por su trabajo”.
“Yo no imaginé cuando tuve en mis brazos a Gabino antes de inhumarlo que un día iba a encontrarme con su madre, y cuando con mi mano tomo la mano de esta mamá argentina siento algo muy especial, porque he perdido a mi propia madre hace 10 años. Siento una felicidad tranquila y profunda de tener a este personaje en mi corazón para siempre” expresó por su parte Cardozo respecto al encuentro finalmente concretado con Elma Pelozo.
Para ambos, el encuentro marcó un punto central de todo lo vivido en torno a la identificación.
“A casi 40 del comienzo del conflicto armado entre Gran Bretaña y Argentina, Elma Pelozo pudo cumplir su sueño: conocer y charlar largamente con la pesona que tuvo a su cargo buscar a su hijo en el campo de batalla e inhumrlo en el Cementario de Darwin, que el mismo Cardozo creó tras la guerra” destacó sobre el encuentro la Fundación No Me Olvides.
