Corrientes, miercoles 03 de diciembre de 2025

Opinión Corrientes

Covid-19: “Los inmorales nos han igualao…”, por Ramón Alberto Salazar Peleato

07-05-2020
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Foto ilustrativa

“Alberto pensá en la economía y que se mueran los que se tengan que morir” -Miau-rico Macri-

"Algunos van a morir, lo siento, pero así es la vida": Bolso-ñaró.

No es cuestión de “achicar el pánico”, pensó el “fronterizo” Bolso-ñaró reencarnando el “pensamiento librecambista” –guita por vidas- del “estadista Miau-rico”, al esbozar su criminal sentencia, ni por un instante se le ocurrió sopesar que la condena -sin límites- recaía sobre su propio pueblo donde conviven más de 210 millones de almas del remante poblacional que más allá de la “Cidade Maravilhosa” de los “cariocas”, aspira el oxígeno de su propia naturaleza territorial.

Guapo el ex milico, mostrando el “coraje” de los cobardes impunes, serviles políticos puesto a gobernar por el capitalismo salvaje para proteger por sobre toda razón de vida el “vil metal”, encontró en este “garotihno” obediente, al verdugo insustituible que utiliza el neoliberalismo “castizo”, para que el presupuesto ideológico enunciado que anula la razón inmolando la conciencia, sea el “arma” utilizada por el interés corporativo y mezquino de ese capitalismo “zaparrastroso” e inmundo que denigra la vida del prójimo, a efecto que Bolso-ñaró “la gatille” convencido que "Algunos van a morir, lo siento, pero así es la vida" sin importarle el costo de vidas sometidas al sacrificio, ni siquiera derramar “una lagrima” por ser responsable del magnicidio en trance.

Y aquí cabe reproducir la vigencia de este pensamiento magnífico que define la conducta ruin de los humanos descripta por “mordisquito” Discépolo, en su “Cambalache” diciendo: “…Los inmorales nos han igualao. Si uno vive en la impostura y otro afana en su ambición, ¡da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos caradura o polizón! Frases con un predicado de total actualidad, que arroja al “cesto de basura”, a tantos impostores y representantes de “la pandemia política”, que ofician de “otarios” y son unos “vivos” facinerosos, haciendo piruetas para seguir políticamente “parados”, mientras otros saldan el costo con sus vidas, a pesar que saben y le consta que “la rueda de la historia” con su proyección y dinámica futura, someten al pasado sin pedir permiso por imperio de su determinismo insobornable, expresado por la impronta de su fatalismo recurrente, “Haciendo tronar el escarmiento” “cuando los pueblos agotan la paciencia”.

Debemos convenir que “el reloj de la historia” tiene un despertador “sin tiempo” que entra “en acción” sorpresivamente, produciendo el cambio de época que impacta sobre las “relaciones de poder”, produciendo la innegable reformulación del sistema de convivencia, permitiendo al Estado –por caso-recuperar el rol estratégico dirimente, controlando el flujo de intereses en juego, que en manos del neoliberalismo sin compromiso nacional, está concentrado en el poder corporativo sectario y excluyente de sus multinacionales, que con voracidad alienante lo vuelven volátil y etéreo, comportándose como si fueran dueños absolutos del patrimonio nacional que enajenan.

Este es el tema que nos debe ocupar siempre, -con pandemia o sin calvario- para que la democracia real tenga efectivo cumplimiento, y el pueblo participación directa “cuando las papas queman” sobre todo en situaciones excepcionales como la actual, donde más allá de toda forma instrumental de tiempo y modo adoptada por el gobierno, cabe expresar la aprobación a la decisión preventiva de cuidar la salud pública sometiendo a cuarentena a la población en todo el territorio nacional.

Señalo lo anterior, ante los reproches sectoriales de los que se ven afectados en la contingencia por la decisión del gobierno que sin dudas, más allá de sus plausibles razones económicas, debemos decir están “abrochados” al gen “cuentapropista” y otros al reciclaje “pandémico” del capital, que es la “vaca lechera” que temporariamente no pueden explotar, decretando “ipso facto” la crisis capitalista por perdida ganancial o lucro cesante causado por la caída de la operatividad de producción y consumo que explota la transversalidad comercial, encartada con dominio exclusivo y excluyente de los dueños del mercado que trepidan en la disputa confrontando entre países de avasallantes linaje, y si cabe el término lo podemos calificar de “casta imperial”.

Argentina está parada enfrentado la emergencia “en punta de pie”, posición de equilibrio que no debe sorprender ni asustar, es un “pax deus” emergente del credo refrendado tantas veces sea necesario por el peronismo, expresando su vocación ideológica-política altruista “porque el otro es un igual que forma parte de mi vida”, en estos menesteres no caben dudas, “serás lo que debas ser, o no serás nada” frase que ha modo de anticipo, cual si fuera un “peronista” continental del siglo XIX colgó en la marquesina histórica “El Libertador”, no es poca cosa decir que éste Pueblo no pierde la memoria porque reporta al presente los líderes fundantes de la Patria.

Sin dudas, la “realidad que es la única verdad” nos hace tomar conciencia de que la humanidad está en llamas, que la “gripecita” de Trump registra en su estadística al día de ayer 2/5/20 67.067 muertos, poniendo de manifiesto que cuando el imperio es atacado por una peste ignota suma víctimas a destajo, porque quien debe proteger y defender a los ciudadanos del enemigo invasivo, carece del valor simbólico y real que se supone conlleva quien ostenta la representación nacional, escamoteando la responsabilidad, y solo atina a integrarse al “núcleo duro” de los popes del capitalismo, compartiendo las bacanales del “laissez faire, laissez passer” económico currero, propio del neoliberalismo en acción, “cueste lo que cueste y caiga quien caiga”. En ésta “zaraza” inhumana está inscripto el nombre de Boris Johnson premier del “reino unido”, lo que nos lleva a decir “de tal palo tal astilla”, correspondiendo agregar que el “quebranto sistémico del estado neoliberal” es una aproximación a la debacle en cierne, que obligará a reformular las expectativas ante un futuro que no será resiliente, porque nadie se propone saltar hacia atrás, de modo que la nueva inteligencia política deberá rescatarse así misma porque las “vías de escape” individuales están cercadas, y el mañana dejará de ser futuro si permanece prisionera de la ambición desmedida, o si el “stablishment” dominante que concentra el “oro del moro”, no es lo suficientemente generoso para saldar sus cuentas y comprender que el imaginario nos induce a un cambio de civilización pensado en términos inclusivos para superar el pecado de injusticia y exclusión que deshumaniza, es hora que la “conciencia del poder” se corrija, de lo contrario habremos dejado pasar la oportunidad de “resurgir de las cenizas” resignando los postulados de vieja data que don Hipólito grabó como principio ideológico respondiéndole al imperio: “Los hombres son sagrados y los Pueblos son sagrados para los Pueblos”.