Así lo señaló a momarandu.com la arquitecta entrerriana Mariana Melhem, una de las expositoras del Primer congreso sobre playas y costas urbanas, que inició hoy viernes en la capital correntina con participantes de distintas partes del país.
“A las propuestas ambientales siempre hay que sostenerlas en el tiempo, uno tiene que poder estar presente siempre. Me parece que la mejor recomendación que se puede hacer es no bajar los brazos y seguir visibilizando. Las cuestiones que se hacen a oscuras no pueden llegar a buen puerto si hay grupos organizados”, comenzó diciendo a momarandu.com una de las expositoras de este primer Congreso sobre playas y costas urbanas, la arquitecta entrerriana Mariana Melhem.
La arquitecta enfatizó la importancia de “la cuestión educativa y la difusión”, y apuntó: “Cuanto más personas formadas e informadas hay en torno a un tema, hay más posibilidades de tener buenos resultados. Lo más importante de todo es tener un pueblo informado; conocer y visibilizar es lo que nos puede salvar”.
Respecto al “derecho a la ciudad”, Melhem dijo a momarandu.com que “en los organismos internacionales se establecen acuerdos. Por ejemplo, en la agenda Hábitat 3 se habla del derecho a la ciudad y se habla de que los intereses de unos pocos no pueden estar por encima de los intereses de la totalidad de la población. Debemos hacer respetar los acuerdos y la organización ciudadana hace respetar los acuerdos”.
Así, detalló: “Hay un primer acuerdo: estamos todos viviendo en una ciudad y hay alguien que gobierna y hay quienes tienen otros roles dentro de esto. Hay también un plan de reordenamiento de la ciudad, y en ese plan es cada vez más exigente la idea de la participación de los vecinos. No una participación desinformada, no una participación de adhesión con los ojos cerrados sino una participación activa, que tenga que ver con el conocimiento de la ciudad y con las demandas reales del pueblo”.
Melhem aclaró que “no se trata de una visión caprichosa ni antimercado sino de poner las cosas en un equilibrio para garantizar la accesibilidad a la ciudad de todos”.
Y se explayó más con ejemplificaciones: “Este es el tema que está de fondo: la playa es una parte de la ciudad, la ciudad es un espacio de construcción colectiva. Es decir, el mayor reducto de la cultura que tenemos es la construcción de la ciudad, entonces esa ciudad que construimos es de todos, la venimos construyendo a lo largo del tiempo y es la marca de identidad que tenemos. Razón por la cual, esa ciudad que construimos entre todos, no puede ser de nadie más que de todos”.
Consultada sobre la escasa o nula comunicación que existe entre autoridades y vecinos cada vez que debe realizarse una construcción que atañe a toda la población, en cualquier parte del país, la arquitecta entrerriana respondió a momarandu.com: “es que hay que fijar acuerdos y establecer cuáles son los compromisos y cuáles son las posibilidades que tiene cada uno de hacer, y eso no significa que todo tiene que quedar congelado, no significa que no se deba ni se pueda invertir, lo que digo es que hay roles, y en esos roles está el rol del Estado como contralor clave, para establecer o para garantizar que todos tengan las mismas posibilidades de acceso”.
Y finalizó: “A mí me parece que ese acuerdo es sobre todo un acuerdo de la sociedad. Nosotros como sociedad –lo digo en términos generales- tenemos poco ejercicio democrático, poco ejercicio participativo, no sabemos hacer escuchar las demandas y se banalizan las demandas porque, a lo mejor, se cree que lo único que uno quiere es hacer ruido y nada más”.
El congreso continúa esta tarde y mañana sábado 7 de marzo, por la mañana. Es organizado por el colectivo Defensores de los Espacios Públicos Costeros. Ver:
Ultiman preparativos del 1° Congreso sobre playas y costas 
