Foto: Ruinas, tras el terremoto con epicentro en Irán que sacudió la frontera con Turquía. En Baskale, Turquía, el 23 de febrero de 2020.
La tierra se estremeció este domingo 23 de febrero en la frontera entre Irán y Turquía. Según el Servicio Geológico de EE. UU, el sismo de 5,7 de magnitud tuvo epicentro a 47 kilómetros de la ciudad de Khoy, en el occidente de Irán, y a 90 kilometros al este de la región turca de Van, que sufrió la mayor parte del daño: las víctimas mortales.
Además, 21 ciudadanos turcos resultaron heridos, incluidos ocho en estado crítico, de acuerdo con el Ministerio de Salud de ese país.
En la provincia de Van, varias personas quedaron atrapadas bajo edificios derrumbados, hasta donde llegaron equipos de rescate que buscan posibles sobrevivientes entre los escombros.
Imágenes de la televisión turca mostraron a personas cavando con palas y con las manos, así como muebles y pertenencias esparcidas por caminos agrietados.
Algunos residentes estaban envueltos en mantas fuera de las casas con las paredes exteriores desmoronadas, techos de metal caídos, grietas amplias y cables retorcidos.
El gobernador de Van, Mehmet Emin Bilmez, señaló que cuatro aldeas que visitó en el municipio de Baskale, todas a menos de diez kilómetros de distancia de la frontera iraní, fueron afectadas.
"El daño causó la pérdida de vidas"(…) "Hay destrucción en las cuatro aldeas", dijo el gobernador Bilmez, frente a una pila de bloques de cemento.
El Centro Sismológico del Mediterráneo Europeo (EMSC) indicó que el movimiento telúrico, que se produjo a las 8:53 a.m. hora local, tuvo una profundidad de cinco kilómetros, alrededor de 3.1 millas.
Pese a que el epicentro del sismo se registró en Irán, allí las autoridades no han informado sobre posibles fallecidos, pues destacan que el terremoto golpeó una zona poco habitada.
"Hasta ahora no hemos tenido informes de daños o muertes en el área, que no es una región poblada en la provincia de Azarbaijan occidental de Irán", dijo un funcionario iraní.
Sin embargo, otro funcionario local dijo que "es muy probable que haya víctimas y daños". Agregó que el terremoto se sintió en varias ciudades, incluidas Urmiah y Salmas, y en muchas aldeas.
Irán y Turquía se encuentran entre los países del mundo más propensos a terremotos.
Un sismo el mes pasado, en el este de Turquía, dejó a alrededor de 40 personas muertas, mientras que otro en Irán causó daños estructurales en las casas, sin causar ningún deceso.
Fuente: Frace 24, Reuters y EFE
