A ello se sumó la resistencia de los jueces en Comodoro Py y la Corte Suprema
La decisión se tomó a horas de que la medida se publique en el Boletín Oficial. Si bien el ministro de Justicia, Germán Garavano, no abandonó su objetivo de sacar del Poder Ejecutivo ese programa, el Presidente decidió corregir fallas técnicas.
Ayer por la noche la decisión estaba tomada y Macri tenía a la firma el decreto de necesidad y urgencia ( DNU) con el traspaso del sistema que alcanza a 225 testigos y 97 familiares a la Cámara de Casación, el máximo tribunal penal del país. De esta manera, la protección de los arrepentidos quedaría bajo la órbita del Poder Judicial.
No obstante, la instalación pública del tema generó una reacción negativa y el Gobierno decidió seguir “dialogando y buscando la mejor forma en un tema
Alberto Fernández se mostró en contra de la iniciativa oficial.
Al respecto, la Corte Suprema de Justicia le planteó al Gobierno que el traspaso sea acompañado por el presupuesto correspondiente y, además, revisar qué fuerzas de seguridad intervienen.
En medio de ese debate, el presidente electo, Alberto Fernández marcó ayer su postura en contra de la resolución.
“Nunca fuimos consultados por semejante tema. Por lo tanto, muy lejos estamos de avalarlo”, escribió vía Twitter el mandatario electo.
Ahora, Garavano decidió posponer el DNU a la espera de lograr mayores avales.
