La salida de la peregrinación es desde el corsódromo Nolo Alías, Corrientes capital. El lema de esta edición número 40 es "Madre, bajo tu mirada discernimos nuestra vida". Ansiedad por llegar a “la casa de la Madre”, el valor de la vida de la juventud, el reconocimiento hacia los jóvenes que caminan y la emoción, recorren los testimonios recogidos por momarandu.com
“Arrancamos en Resistencia, Chaco, de la parroquia Santísima Trinidad. Venimos con un grupo de cincuenta jóvenes con quienes vamos a hacer la caminata. Venimos con mucha emoción; la mayoría de los jóvenes viene con fe, eso es lo importante, la motivación, y María es la que mueve este caminar. Llevaremos a sus pies las intenciones de todas las personas que nos pidieron para que recemos por ellos”, dice la hermana Daniela Cecilia Lleres de la arquidiócesis de Resistencia a momarandu.com.
La hermana Lleres –de la Sagrada Familia de Bordeos- cuenta que es la primera vez que participa con un grupo tan numeroso de jóvenes. Dice a momarandu.com que “ve la realidad juvenil: ese dejar lo que la sociedad hoy día les ofrece y seguir a Jesús de mano de María”, por eso desea que estos jóvenes “sean felices, en el lugar que estén, que puedan encontrar.
Por otra parte, la hermana Eusa Crisma Santos de Oliveira, oriunda de Brasil –Bahía-, pero con residencia en Argentina hace 35 años, y lleva 3 en Formosa, narra a momarandu.com que “hace tres años es guía de ruta” y que le “encanta este servicio de guiar a nuestros jóvenes, de acompañarlos. Somos un grupo bastante grande, hay cuatro colectivos que están saliendo de Formosa y ya están llegando. Es una gracia de Dios guiar a los jóvenes en la ruta”.
La hermana Eusa cuenta que “todos los años los jóvenes está motivados”, y cree que este año “es muy especial. Los chicos tienen mucha fuerza, muchas ganas de amar a la Virgen”.
Como asesora, de pastora de juventud a nivel diocesano, la hermana Eusa dice a momarandu.com que “el futuro de los jóvenes depende del presente de los adultos. El Santo Padre, en su documento Cristo Vive, dice que nosotros, los adultos, tenemos que dar ese impulso a los jóvenes, tenemos que tener presencia en la juventud”.
Para ella existe en el Noa y en el Nea una “mayor sensibilidad con María”, y dice para finalizar que “tenemos que apostar por la vida. Primero agradecerla, y después, ayudar a los jóvenes a entender que su vida vale la pena”.
Alicia Navenar de la parroquia San Antonio de Padua de la localidad de Virasoro, diócesis de Santo Tomé, llegó junto a un nutrido grupo de jóvenes al corsódromo para esperar la salida a pie hacia Itatí. “Estamos con mucha ansiedad de llegar a la casa de nuestra madre con 56 jóvenes a bordo más 20 que vienen en una combi. Hace siete que venimos con este grupo; la intención es traer todo a la Virgen…los jóvenes, por ejemplo, traen sus intenciones y las ponen en manos de la Virgen”. Alicia reconoce que el flagelo de la droga causa estragos en la juventud, por eso celebra que “muchos jóvenes dejen de lado eso y decidan unirse a María en esta peregrinación”.
Alicia se siente emocionada por apoyar a “nuestros jóvenes”, y se despide para salir a peregrinar.
De esta nueva edición de la peregrinación de la juventud del Nea, participan diez diócesis de la región.
Por tratarse de una edición especial, ya que se cumplen 40 años de la primera peregrinación, los obispos de la región han animado a sus jóvenes a vivir esta demostración de amor a la Virgen como una fiesta de la Iglesia. Ellos estarán en Itatí acompañando a los peregrinos.
Juntos concelebrarán la Santa Misa central el domingo a las 8, en el atrio del templo. La eucaristía, en ausencia del metropolitano (el anfitrión), monseñor Andrés Stanovnik, la presidirá el arzobispo de Resistencia, monseñor Ramón Dus, y predicará el obispo de Formosa, monseñor José Vicente Conejero Gallego, quien ha participado de las primeras peregrinaciones (leer más en nota relacionada).
