Luego de la expulsión en el primer tiempo del partido ante Chile, Lionel Messi no fue a recibir la medalla de bronce en la Copa América en el acto de ceremonia final, en el Arena Corinthians de San Pablo.
Con enojo, el capitán apuntó contra la Confederación Sudamericana de Fútbol, Conmebol: “No quiero ser parte de esta corrupción“. El enojo se acumuló a lo que había ocurrido en el partido de semifinales ante Brasil. En ese juego, no se revisaron con el VAR dos jugadas polémicas y con posibilidad de penal a favor de Argentina.
El capitán confesó que no fue a la premiación por el tercer puesto “por todo un poco”. Y afirmó: “Nosotros no tenemos que ser parte de esta corrupción, de esta falta de respeto de toda la Copa. Estábamos para más. La corrupción, los árbitros y todo eso no permite que la gente participe del fútbol, del show”.
Leo dijo que “Medel es un jugador que va al límite” y “que tiene muchas de estas peleas”. “No era roja para ninguno. Terminaba ahí, amarilla para cada uno y listo. El árbitro me pidió que lo manejemos al partido y que le gustaba hablar. Pero a la primera de cambio me echa a mí”, añadió.
También habló Sergio “Kun” Agüero y dijo en referencia a Messi: “No está caliente, está tranquilo, pero se siente extraño por todo lo que está pasando con la Conmebol“. Y agregó: “Es medio extraño, por lo que dijo después de Brasil. Fue una situación para una amarilla. Por ahí se maquina por lo que sucedió durante el partido frente a Chile. Vamos a tratar de que se componga y que esté bien”.
Al terminar la entrega del premios, La Pulga compartió una publicación en su Instagram: “Nos vamos de esta Copa con un triunfo y sobre todo con la cabeza en alta y con la sensación de que esta vez el fútbol no fue justo con nosotros”. Y agregó: “Merecíamos estar en la final de mañana“.
Publicación de Lionel Messi. Crédito: Instagram
Publicación de Lionel Messi. Crédito: Instagram
Qué dice el reglamento
Reglamentariamente, la Pulga estaba en condiciones de recibir la medalla pese a dejar el campo de juego por la expulsión. Pero no quiso hacerlo. Mientras que Medel, si fue a la campo de juego.
Es la segunda expulsión de Messi en el seleccionado mayor. La primera fue en su partido inaugural con la camiseta albiceleste, con Hungría en 2005. Ahora, 135 encuentros después, volvió a tener que irse antes de tiempo al vestuario. Son las únicas de su carrera como profesional. En Barcelona, Leo no sufrió ninguna expulsión en 687 juegos, por múltiples torneos.
Fuente: Tv Pública
